“… Luis y María iniciaron la vida en pareja con unas expectativas, ilusiones, y con la idea que habían encontrado, cada uno en el otro, al compañero/a ideal. Ha pasado el tiempo y ambos perciben cierta insatisfacción. Hay aspectos que ya no funcionan, cada vez son más frecuentes las discusiones. Las críticas y reproches aumentan su distanciamiento, siendo cada vez más difícil llegar a acuerdos y entendimientos. La espiral de confrontación se ha agravado con la inclusión de terceros (hijos/as, familias de origen, amigos, compañeros, etc?) que van tomando partido, extendiendo el conflicto a límites ya no controlables por la pareja”
¿Cuáles son los motivos que dan origen o mantienen el problema de la pareja?
Las separaciones y divorcio en Euskadi en el primer trimestre de este año, 2014, han aumentado el 16,4% según los datos del Consejo General del Poder judicial. Supera con creces la media en el conjunto de España, que fue del 11,3%.
Las demandas de divorcio consensuados en el País Vasco aumentaron un 19,8%, frente a las separaciones (17,1%). También crecieron los divorcios sin acuerdo mutuo un 11,8%, y en las separaciones se mantuvieron estables con respecto al año anterior.
Llegados a este punto, los problemas que con mayor frecuencia provocan las desavenencias conyugales, crisis en la relación y hasta el planteamiento de separación o no, tienen que ver por una lado en el funcionamiento propio de la pareja y en los problemas de conviviencia.
Aspectos que se refieren al funcionamieto de la relación de pareja
- Dedicar demasiado tiempo al trabajo. Si la pareja no encuentra un espacio de tiempo para el ocio, para inventar nuevas formas de diversión para cada etapa de la vida, para compartir sus experiencias, etc. la relación se vuelve más vulnerable. Es más importante la calidad del tiempo compartido que la cantidad.
- El reparto de las tareas del hogar. La falta de implicación por parte del hombre se traduce como el poco apoyo de él hacia ella.
- Diferencias en el estatus laboral. Los hombres no suelen aceptar bien que su pareja tenga un nivel económico y profesional superior al suyo, según la doctora García.
- Los problemas económicos. No es tan importante cuánto dinero se tiene sino en qué se gasta. Es decir, si las dos personas están de acuerdo en cómo administrar su economía.
- Las familias políticas. No saber poner límites a la familia de origen o mantener una relación descompensada con una de las familias puede originar graves desencuentros.
- Problemas de salud (físicos o mentales) , adicciones (drogas, alcohol, ludopatía, etc). Pese a la gravedad que enfermedades como la depresión o las adicciones puedan interferir en las relaciones de pareja, no suelen ser los determinantes más habituales de las rupturas.
Problemas de convivencia
Suelen ponerse de manifiesto en vacaciones. La cercanía es como una lente de aumento, pone todo en evidencia. Si lo que hay entre dos personas es positivo, también aflora, explica Navarro Góngora.
- Falta de comunicación o falta de entendimiento. Es a la vez causa y efecto de una mala relación de pareja.
- Problemas sexuales. Las relaciones sexuales son la expresión de la intimidad. Los problemas sexuales pueden ser el origen del conflicto, por ejemplo una disfunción como la expresión de una relación negativa, es decir, la consecuencia de una mala relación.
- La infidelidad. El descubrimiento de que existe otra relación amorosa desencadena una crisis en la pareja.
- La violencia doméstica. Es fuente de muy graves conflictos familiares y de pareja.
- Crisis vitales a lo largo de la propia historia de la pareja.
¿Qué le puede ofrecer la Terapia de Pareja?
Objetivos de la terapia de pareja
- Resolver y superar las diferencias y problemas de relación que impiden a la pareja proseguir la vida en común.
- Conseguir una convivencia más positiva y mutuamente satisfactoria y reforzante.
Intervención en la terapia de pareja
- Reconducir el conflicto al ámbito de la pareja.
- Aprender a comunicar verbalmente las dificultades que afectan a la convivencia y luego negociarlas, llegando a acuerdos sobre las mismas.
- Revisar y ajustar los valores y formas de pensar, las posiciones de poder, para poder establecer pautas de relación mejores.
Consejos para mejorar una relación de Pareja
Uno de los secretos para mantener una buena relación es que las dos personas que integran la pareja sepan hacerse mutuamente la existencia más agradable. Existen una serie de pautas sencillas que fomentan una relación más positiva y viva:
- Las parejas que se llevan bien son las que son capaces de reducir el conflicto mutuo. Los mecanismos son muy variados y pueden basarse en el humor, en restar importancia a ciertos asuntos, etc. Hay parejas estables que se pelean mucho pero que duran porque saben responder con ciertos mecanismos de reducción de conflictos.
- Una relación tiene mucho de intercambio, por ello es muy importante saber negociar. Todo acaba sopesándose, desde el cariño que cada uno da al otro hasta el dinero que gana. Cultivar la amistad con aquella persona con quien se convive facilita la solución de los problemas que van surgiendo de la convivencia y se fortalece de la relación. Buscar momentos para poder celebrar fechas especiales en la pareja, desde el aniversario de boda hasta la superación de momentos complicados en la propia historia.
- Sorprender a la pareja con algo agradable, sencillo que sea significativo dentro de su relación, por ejemplo hacer algo por el otro dentro de la rutina diaria, preparar algún pequeño evento.
- Intercambiar conductas agradables, para dar mayor satisfacción a la relación de pareja. No olvidarse de los pequeños detalles; como un beso, un abrazo al levantarse o al despedirse diariamente, buscar tiempo para estar solos sin los niños, decir al otro qué cosas agradables hace el otro, etc. Un aspecto importante es la relación sexual dentro de la pareja. Lo que se persigue es que el aumento de la carga positiva reduzca los intercambios negativos a medio plazo.
- Saber comunicar al otro lo que queremos trasmitirle, y ser responsable de aquello que se dice, tanto lo que nos gusta del otro como lo que nos disgusta. De esta manera el otro irá conociendo a su pareja para poder compartir sentimientos, anticiparse a sus gustos necesidades, creando símbolos, situaciones, lugares, etc que su presencia o recuerdos elicite sentimientos positivos.
- El otro debe conocer todo aquello que queramos comunicarle. El manejo de ciertas habilidades comunicativas debe asegurar que el receptor asimile el mensaje, por ejemplo, el hablante se expresa en primera persona sin culpabilizar, siendo conciso y concreto, y el oyente escucha sin emitir juicios reflejando los sentimientos del otro. Esto implica que hay que asumir la responsabilidad de lo que se dice.
2 comentarios. Dejar nuevo
hola, llevo en un matrimonio de 20 largos años y creo que es lo mas dificil, mi marido se cierra cuanto más enfadado está, y yo estoy super sensible a todo, si digo una palabra o dice el una palabra y cae mal, qué hacer?, cómo avanzar , habrá algunos consejos para tener en cuenta?. Tendré que hacer terapia yo para luego incentivar a él.- gracias
Hola, Selena
En un matrimonio después de años, hay formas de relacionaros en la convivencia se van repitiendo y lo que en un principio no se daba mucha importancia al cabo de los años vaya molestando. Se trata de buscar la forma de hacer lo más agradable posible la vida entre ambos, que haya momentos donde la satisfacción de la relación supere a esos momentos, y aquello que nos molesta del otro se pueda hablar.
Puedes comentarle a él lo que os ocurre y consultar también con un psicólogo de pareja para mejorar y avanzar conjuntamente. Mejor si vais los dos.
Saludos,